Como era de esperarse, ya se ha publicado una nota en nombre del Comité Organizador de la Décima Bienal de La Habana, en respuesta a la perfomance realizada por Tania Bruguera, y aplaudida por todos los allí presentes.
Ésta nota nos llega con el mismo halo de dudas que rodeaba a las dos cartas de renuncia de Felipe Pérez Roque y Carlos Lage.
No podremos saber a ciencia cierta, si quienes redactan y firman la nota están de acuerdo con ella, si es que lo hacen por convicción, si es orientada desde arriba por la vertical por donde caen raudas y veloz las órdenes superiores, o si es porque se han molestado porque el resto de la exposición de la Bienal quedó vacía, ante el atractivo de la magistral obra de Tania Bruguera.
En cualquier caso, lo que si queda claro, es que al gobierno de Cuba poco le importa lo que piensa el pueblo y la juventud.
Es asombroso ver la capacidad analítica sobre los problemas políticos de Cuba que poseen los jóvenes, y ver el lado opuesto, en el que Nuestra Señora de los Gays, como bien apodó Carlos Alberto Montaner a Mariela Castro, en respuesta a aquella famosa pregunta que le hizo Yoanis Sanchez, respondió que ella no sabía nada de política, en pocas palabras dio a entender que solo sabe de gays y de lesbianas.
No hablaré mucho de éste tema, pues no quiero confundir a la juventud y hacerles pensar que la salida al problema de Cuba, es que todos se conviertan en gays y lesbianas, ni tampoco darle ideas a Mariela Castro, porque seguiría en su empeño hasta llegar a asignar coches al gay vanguardia y a la lesbiana vanguardia.
Tampoco quiero darle ideas al Comité Organizador de la Décima Bienal de La Habana, no vaya a ser que para el próximo performance se les ocurra decirle a Nuestra Señora de los Gays, que coja el micrófono, entonces sí quedaría vacío el Centro de Arte Contemporáneo Wilfredo Lam.
La perfomance de Tania Bruguera ha sido tan magistral, que no solo ha servido para el placer de vivir unos minutos de libertad a unos pocos participantes, sino para que el propio Comité Organizador redactase lo que bien pudiera ser, el Epitafio de la Dinastía de los Castro.
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