Por: Roberto de Jesús Guerra Pérez
Centro de Información Hablemos Press (CIHPRESS)
Ciudad de La Habana, Cuba, 1 de Octubre/Hablemos Press/ Autoridades carcelarias le mostraron por 15 minutos a Misley Bonachea Hernández, a su esposo, el recluso Eddy Rodríguez Álvarez, quien el pasado 28 fue sorprendido en la prisión Cerámica Roja en un intento de fuga.
"Me dejaron verlo por 15 minutos y pudimos conversar, él tiene fracturas en la mano derecha, las piernas y en las costillas, también muchos hematomas en todo el cuerpo, la cara y está muy hinchado", declaró Misley a Hablemos Press.
Rodríguez Álvarez fue el cuarto reo que intentó fugarse de Cerámica Roja, atrapado por los militares quienes lo golpearon salvajemente hasta dejarlo desmayado, según dieron a conocer a esta agencia varios reclusos de ese recinto, sus familiares y el prisionero político Jorge Alberto Liriano Linares.
Según la joven, su esposo le contó que intentó fugarse con otros tres que no han sido capturados y explica que en ningún momento se le reviró a la policía, ni corrió cuando fue sorprendido, que los vigilantes lo apalearon para cobrarse por el resto de los fugados.
Mi esposo me dijo que cuando lo llevaron al hospital no quisieron darle certificado médico. Se queja que se siente muy mal, no está comiendo, vomita y ha hecho varias cacas con sangre. El médico le expresó que eso era normal, pero estoy muy preocupada porque he conocido de otros casos que han muerto días después de la golpiza.
Eddy permanece en una celda de castigo desde el día 28. Se niegan a trasladarlo a un hospital. El militar en jefe, mayor Guille, que atendió a Bonachea, le informó que las reglas disciplinarias de la penitenciaría establecen que debe estar allí hasta el día 13, fecha en que cumplirá el castigo. El reo ahora enfrenta dos acusaciones según la policía por Evasión y Atentado.
El trato aparentemente de las autoridades hacia Bonachea Hernández fue muy respetuoso, pero según narra Jorge Alberto, "ha Eddy dos guardias lo pasean por los pasillos de la prisión sosteniéndolo por los brazos como ejemplo de escarmiento a la población penal".
"Un oficial de alto rango que se apellida Sardiñas fue quien capturó a Rodríguez y se lo entregó a la guarnición para que le dieran", me confesó.
Misley se presentó en la Fiscalía Militar en la capital y en las oficinas de 15 y K que atiende cárceles y prisiones nacionales con el objetivo de exigir que su esposo fuese trasladado a un hospital, pero una oficial de nombre Tania le informó que ya conocían del caso y que cuando ocurren hechos como ese, "es orientado golpear y hasta disparar y matar".
Álvarez está dispuesto a denunciar a los militares que lo golpearon de los cuales conoce sus nombres, pues fundamenta que cuando lo sorprendieron se paró.
Misley Bonachea Hernández reside en la Ave 71 entre 134 y 136, Marianao.
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