Jorge Alberto Liriano Linares, desde la prisión Provisional Cerámica Roja dicta los textos por teléfono y Magaly Norvis Otero Suarez los transcribe.
Camagüey, 13 de enero― Durante 50 años el régimen dictatorial entronizado en Cuba se ha reído y continúa sínicamente riéndose de las Naciones Unidas y el derecho internacional.
Todas aquellas personas que por desgracia han ido a parar a unos de los cientos de cárceles y campamentos de trabajo forzado, diseminados a lo largo y ancho de la isla, pueden evidenciar los tratos crueles y las aberrantes torturas a las que son sometidos los presos en el interior de las cárceles.
La cifra de seres humanos encarcelados durante este medio siglo, de los perseguidos y reprimidos por las fuerzas represivas al servicio del régimen, es astronómica. La cifra actual de presos en Cuba, es secreto de estado. Aún cuando muchos conocemos que supera los más de 250 000 seres humanos en su gran mayoría jóvenes afrocubanos menores de 25 años.
En Cuba, el que no está preso lo andan buscando, y es el propio gobierno quien engendra los delitos y la corrupción social. Decir prisión en Cuba durante este medio siglo es decir hacinamiento, insalubridad, hambre, desnutrición, tratos crueles, torturas y asesinatos. Decir sistema penitenciario en Cuba es decir plagas, epidemias, y enfermedades.
A las cárceles cubanas se sabe cuando se entra pero nunca cuando se sale, debido a la barbarie ultrajante e inhumana a la que son expuestos los prisioneros. El sistema judicial al servicio de la tiranía que responde a los intereses del sistema es un mecanismo semejante al utilizado por Hitler y muchos otros dictadores.
El hacinamiento de personas y la violación de las normas para el trato a los prisioneros en el interior de las cárceles poco le importan a los gobernantes. A los presos cubanos solo se les respeta un solo derecho, el derecho a morirse.
Al cierre del 2009 e inicio del 2010 cientos de personas ingresaron en la prisión provisional Cerámica Roja, duermen en el piso por falta de camas y de colchones, en celdas de cuatro metros de ancho por cuatro metros de largo, y un solo hueco turco para realizar las necesidades. Son confinados entre 15 o 20 prisioneros, sin avituallamiento e incluso, ni una frazada para cubrirse del frio intenso que por estos días arrecia sobre todo el territorio cubano.
La falta de fluido eléctrico, la escasez de agua potable y la insalubridad del medio, engendran plagas de insectos y roedores, las chinchas, los piojos, las moscas, cucarachas y ratones comparten el hostil encierro con los presos.
La falta de higiene se extiende a los comedores, donde las pocas cucharas y bandejas son apenas lavadas con agua sucia sin ningún tipo de detergente limpiador. Otros de los grandes y criminales castigo que deben enfrentar los presos en Cuba, es el hambre.
Al cierre del 2009 en esta prisión el 90% de la población penal padecía de total desnutrición, 836 prisioneros se encontraban por debajo de su peso corporal y a los enfermos del SIDA, diabéticos o hipertensos no se les garantiza, ni se les garantizará la dieta medica alimentaria que requiere.
Los pocos alimentos que asigna el gobierno son escamoteados por la corruptiva militar que inescrupulosamente y en total impunidad, se roban hasta los desperdicios para alimentar a los puercos.
El aislamiento y la incomunicación es otro de los factores que atenta contra la psiquis de los condenados, cortan el fluido eléctrico de 6 de la mañana a 8 de la noche, no hay televisión ni acceso a la prensa ni a la correspondencia.
Enfermedades como la tuberculosis tiene su caldo de cultivo en este antro, donde hasta el acceso al aire libre o soleadores es limitado por las autoridades. Los servicios médicos no cumplen su objetivo. No hay médicos ni medicina, no funcionan los servicios estomatológicos por la falta de agua y fluido eléctrico.
Los tratos crueles y las torturas físicas y psicológicas crecen por días, al cierre del 2009, 83 reclusos fueron torturados desnudos crucificados en celdas de castigo de esta prisión, 121 fueron masacrados a golpes por la fuerza represiva del orden interior, 28 reos trataron de suicidarse producto a la represión, los tratos crueles, y las penurias a que son expuesto, un preso de 21 años de edad falleció después de tratar de suicidarse, este joven fue golpeado y torturado en la celda del corredor de las torturas el pasado 28 de octubre.
Injustificablemente prisioneros contagiados con el VIH/SIDA, fueron torturados en las celdas de castigos, en la actualidad 14 de estos prisioneros enfermos permanecen sin atención médica, ni medicamento, ni la alimentación, ni el trato especializado que requieren, en una celda del ala oeste del penal, en espera de ser internados en un centro hospitalario o sanatorio condenados a muerte doblemente.
Lo asombroso de todos estos crímenes y actos violatorios, es que los torturadores y criminales uniformados actúan en total impunidad, el gobierno, la fiscalía, callan y tratan de no aplicar la ley a quienes violan los derechos humanos, tal vez los gobernantes cubanos y sus torturadores uniformados piensen que la impunidad es eterna y que nunca serán alcanzados por la justicia, pero los tiempos cambian, y la verdad y la justicia tardan, pero llegan, es necesario recordar que los crímenes de lesa humanidad no prescriben en el tiempo.
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