Buscar en archivos de Mambí en Acción






jueves, 7 de octubre de 2010

Denuncia por detención arbitraria de joven cubano

CAHRA (Committee to Aid Human Rights Activists) con sede en North Bergen, New Jersey, hace llegar a todos los organismos internacionales de derechos humanos, a la prensa y a los gobiernos demócratas del mundo, la siguiente denuncia enviada a nosotros por Joenni Alonso, ex dirigente del Partido Democrático 30 de Noviembre -Frank País- sobre la detención arbitraria de su hermano, Emilio Sánchez, por agentes de los servicios policiales cubanos. El joven Emilio, desesperado por la situación político-económica que vive el pueblo cubano, se atrevió a gritar ABAJO FIDEL desde la puerta de su casa, motivo por el cual se lo llevaron preso sin derecho a fianza y acusado de peligrosidad. Su desesperación la comparte actualmente medio millón de cubanos que han comenzado a ser expulsados de sus trabajos producto de las nuevas medidas impuestas por el gobierno cubano. Es la inconformidad de la actual generación que se rebela ante más de 51 años de opresión y esclavitud.

Nuestro Comité se hace eco del sufrimiento de la señora Odalis Alonso y de la desesperación de su hijo Emilio, y hace responsable a la dictadura cubana por cualquier cosa que le pueda pasar al joven Emilio.

Luis Israel Abreu
Director Ejecutivo de CAHRA

DENUNCIA

En horas del medio día del viernes 1ro de octubre del 2010, Emilio Sánchez, mi hermano de 20 años de edad, gritó en la puerta de su casa: ABAJO FIDEL, lo que trajo como consecuencia que a la media hora se personara en su vivienda el oficial René con dos policías más, lo esposaron y se lo llevaron en un patrullero rumbo a la Oncena Estación de la Policía Nacional Revolucionaria de San Miguel del Padrón.

Su vivienda está ubicada en Calle B #177 del Reparto María Luisa en San Miguel del Padrón, La Habana. Nuestra madre, Odalis Alonso, fue a la estación para indagar por su hijo y los oficiales le dijeron que Emilio no estaba allí, lo cual era falso.

Lo mantuvieron oculto hasta el lunes 4 en la mañana, cuando nuestra madre se personó nuevamente en la estación de la Policía, llorando por la suerte de su hijo y una oficial le dijo que efectivamente estaba allí desde el viernes y que sería acusado por peligrosidad, ya que Emilio estaba fichado como contra-revolucionario, y entonces le preguntó a nuestra madre que si ella no sabía que su hijo pertenecía a los movimientos de derechos humanos. Su respuesta fue que eso no era cierto, la oficial la amenazó con dejarla presa a ella también por encubridora. Nuestra madre le respondió que hiciera lo que quisiera, ya que por su hijo era capaz de dar hasta la vida si fuera necesario.

Horas después del mismo lunes, el oficial René de la Seguridad del Estado llamó a nuestra madre, la llevó para sus oficinas y le dejó bien claro que Emilio no saldría de allí hasta el día del juicio, y que no sabía cuándo será. Agregó que mi hermano lo tenía vuelto loco y que por otra parte su otro hijo (yo) se les había escapado, pero que Emilio pagaría por los dos y que lo mandarían para Villa Clara, a cientos de kilómetros de su casa.

Dado por Joenni Alonso, el 5 de octubre de 2010, desde la ciudad de Elizabeth, New Jersey.

No hay comentarios: