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GUIA PARA EL TRABAJO CIUDADANO
Esta propuesta en su primer paso está encaminada a retomar la participación ciudadana, defender la propiedad privada y otros cambios de beneficio popular, entre ellos el promover la democratización de las elecciones.
El objetivo de retomar la participación ciudadana es el de, a título personal, ponernos al lado del pueblo y dentro del pueblo, para expresar de forma comedida lo que muchos desean y no se atreven a decir por miedo. Con esta actitud contribuiremos a menguar el miedo hoy generalizado, promoveremos el debate verdadero para decir al gobierno y al mundo cuáles son los cambios que queremos los cubanos, los que sin lugar a dudas distan mucho de lo que hoy el gobierno presenta como decisión del pueblo.
Los temas a enfocar tendrán un alcance nacional y local. El primero a tratar del ámbito nacional será el de la propiedad privada por su importancia, más adelante se abordaría la doble moneda y otros (deben de tratarse uno a uno), los temas locales se deciden en cada instancia. La herramienta de trabajo será la encuesta única que solo variará en el tema local (seremos receptivos a las ideas de mejoramiento para encuestas próximas, pero no debe hacerse cambios a la presente).
Para realizar las encuestas, los grupos eligen a un encargado por zona, pero donde no lo hubiere cualquier ciudadano puede ocuparse del asunto. El responsable de encuesta debe de elegir a varios encuestadores e instruirlos para la realización del trabajo, que debe abarcar el espectro poblacional más amplio posible: estos pueden ir de casa en casa o tomarlos en un punto de afluencia de vecinos, como parque o paradas de ómnibus. La encuesta debe presentarse como un estudio apolítico y anónimo para conocer qué quiere de veras el pueblo, recabando total sinceridad del encuestado. En cada planilla deben recogerse la mayor cantidad de entrevistas posibles representando las respuestas por rayitas verticales o palitos en el espacio correspondiente (caben alrededor de 30), posteriormente el responsable realiza un resumen acumulativo de todos los resultados y llena dos planillas con los números finales: una para el Delegado del Poder Popular y otra para su grupo o para el encargado de esta Fundación según proceda.
El responsable del trabajo de encuesta de cada zona visitará al Delegado del Poder Popular de su localidad para entregarle copia de los resultados de la misma. Así mismo informarle que comenzará a participar como ciudadano para debatir temas sociales o de interés de la comunidad en las reuniones de rendición de cuentas, que se abstendrá en los asuntos de connotación política, para no crear confrontación y que espera ser respetado como merece esta condición de ciudadano (esto no incluye la participación en las elecciones). Cuando llegue la reunión en cuestión recabará respuesta sobre los planteamientos efectuados y los debatirá en público con sobriedad y cordura. Si algún asistente tratara de cuartarle con agresión física o verbal, no debemos inmutarnos, solo reclamar al Delegado que ponga orden y recuerde a la persona en cuestión que allí es un ciudadano igual que los demás y debe respetar a todos (estos incidentes u otros deben reportarse).
La nueva labor la pueden desempeñar todos los grupos y personas de forma autónoma y a los cuales estaremos en la mejor disposición de instruir y adiestrar mediante conferencias y debates en sus sedes sin que medie otro compromiso. Solo pedimos colaboración de información de los resultados para consolidar el trabajo global con nuestro reconocimiento público el cual lo extenderemos además en soporte de papel para personas o grupos.
En lo tocante a las elecciones, no abogamos por participar en las mismas, aunque respetamos al que tome esa decisión; nuestro objetivo será el promover la democratización y transparencia de las mismas. Con este empeño en un futuro próximo realizaremos algunas encuestas al respecto.
Modelo para la Encuesta Ciudadana
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