Barcelona/ Mambí en A/ La plaza de Tahrir sigue celebrando la caída de Hosni Mubarak. Un día después de que la presión popular obligara a dimitir al presidente, la gente no se ha movido del epicentro del levantamiento.
Las banderas egipcias continuaban representando el valor de un pueblo unido que ha logrado el objetivo común. Pero las protestas volverán si el nuevo Gobierno no cumple sus promesas, como ha anunciado el movimiento 25 de enero. Muchos ven ahora un cielo despejado para poder cambiar el país.
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