Barcelona/ Mambí en A/ Stéphane Gatignon, alcalde de la localidad francesa de Sevren, comenzó una huelga de hambre el pasado viernes. Su localidad está pasando apuros financieros.
Frente al parlamento, en la capital, pide fondos para ayudar a los 100 pueblos más pobres de Francia, que tienen una tasa de desempleo por encima de la media nacional. "La crisis de la deuda de los Estados está afectando a las colectividades territoriales. El problema que tenemos es que hemos hecho obras y necesitamos crédito para pagarlas. Se trata de obras urbanas o ampliación de las escuelas, y ahora los bancos no nos quieren prestar dinero. Tenemos que conseguir financiación estructural para poder acceder al crédito."
Aunque el domingo a primera hora el gobierno le comunicó que su alcaldía recibiría la ayuda excepcional de 4,7 millones de euros, Gatignon ha decidido continuar con la huelga hasta este martes, cuando se vota en el parlamento un paquete de ayudas locales para estos casos.
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