Barcelona/ Mambí en A/ La ONU dio luz verde a una resolución que condena la violencia del régimen sirio y aboga por un proceso de transición política en la nación árabe.
Una vez más la ONU, después de más de 2 años del genocidio que padece el pueblo sirio, repite la misma cantaleta como signo de impotencia ante los oidos sordos y falta de escrúpulos, del régimen de Basar al Asad. No obstante, y en un intento más por esconder su inutilidad para la resolución de conflictos internacionales relativos a los derechos humanos, la palabra genocidio no es pronunciada, sustituyéndola por: "intensas violaciones de los derechos humanos".
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