Barcelona/ Mambí en A/ En horas de la madrugada y de forma violenta, irrumpieron funcionarios de la Dirección de Inteligencia Militar de Venezuela (DGCIM) a las celdas de Leopoldo López, Daniel Ceballos, Enzo Scarano y Salvatore Lucchese, para practicar una requisa en la que además de quitar sus pertenencias y libros, fue brutalmente golpeado y esposado el alcalde de San Diego.
La defensa de Leopoldo López, en compañía de la Dirección Nacional de Voluntad Popular, acudió en horas de la mañana a la Fiscalía General de la República para introducir un documento en el que denuncia violación de los derechos humanos en contra de los presos políticos recluidos en Ramo Verde. En ese sentido, el abogado Juan Carlos Gutiérrez denunció el incumplimiento del coronel y director del penal, Omero Miranda, al acuerdo firmado el pasado lunes 21 de julio por él, por la directora de Derechos Fundamentales, María Bertely, la defensa de los detenidos y ellos mismos, para que las autoridades asumieran el compromiso de hacer cesar la situación de aislamiento.
“Lo ocurrido en la madrugada de hoy es de una inmensa gravedad. No solamente por la flagrante violación de derechos fundamentales que se han producido contra los presos políticos en la cárcel militar de Ramo Verde, sino también, al incumplimiento del acuerdo escrito y presentado en un documento el lunes de esta semana. Compromiso que incluía contacto entre los presos, acceso a áreas deportivas, un horario muy bien coordinado para las visitas de familiares y terceras personas, con la necesidad de que se respetara los derechos fundamentales y se cumplieran los reglamentos jurídicos que prohíbe la imposición de penas y castigos a personas que están sometidas a un proceso y se le presume inocente. Se trata de la violación de un acuerdo y una palabra empeñada”.
Para Freddy Guevara dicho acuerdo fue una trampa para continuar con la persecución y tortura psicológica a Leopoldo López, Daniel Ceballos, Enzo Scarano y Salvatore Lucchese. “El plan que hay detrás de esto, es entender que la Fiscal hizo un planteamiento que no entendemos. Ellos reconocen con la Dirección de Derechos Fundamentales que hay un aislamiento, por lo tanto, hicieron una medida legal que garantizaba que ellos podían ejercer todos sus derechos. Lo que vemos es que esto fue una trampa para que ellos pudieran estar un tiempo fuera, les tomaran una foto, la difundieran nacional e internacionalmente para decir que ellos no estaban aislados. Eso es una campaña vil y sucia que lo que hizo fue utilizar las ganas de Leopoldo, Daniel, Enzo y Salvatore de estar un poquito más libre de la celda en la que están confinados, para en paralelo volverlos a encerrar otra vez”.
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